Una postura extrema por la elasticidad que requiere de ella: las piernas totalmente dobladas junto al cuerpo. Además tiene un alto componente de dominación, ya que ella apenas puede moverse, estando completamente limitada a ser penetrada. Sin embargo es una de las pocas posturas tan dominantes que proporciona una enorme intimidad al estar las caras muy cercanas.
Una postura de equilibrio, en la que ella echa el cuerpo hacia delante y él tiene que ayudarla a sostenerse. Ella puede mover la cadera para hacer el movimiento de penetración, o quedarse quieta mientras Leer más…
Una postura muy similar a la 582, pero añadiendo el beso. Eso sí, más vale que ella sea elástica! Puede combinarse muy bien con dominación, agarrándola a ella del cuello.
Una postura un poco más complicada por el equilibrio: mejor que ella esté bien apoyada contra una encimera o mueble, y sobre todo que el suelo no sea resbaladizo!
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