Con el buen tiempo tenemos ganas de salir a comer en la naturaleza, cogernos una manta y algo de comida y salir a disfrutar del solecito. Os proponemos añadir erotismo y sexualidad a la mezcla, y estar preparados para convertir un picnic en una excitante salida erótica.
Ya hemos hablado de las posibilidades que nos dan el paseo por el monte y el sexo en la naturaleza en general. Pero en esta receta lo combinamos con la comida y un poco de exhicionismo, a la vez que lo alargamos para convertirlo en una actividad de toda la tarde.
Primero: cuándo
Aunque puede que el tiempo acompañe y podamos preparar un picnic, lo más probable es que sea una actividad escogida a última hora, como respuesta a un día especialmente bueno y para el que no teníamos preparado nada. Así que lo más importante es tener siempre en la cabeza esta alternativa.
Si se acerca el buen tiempo y prevemos que tendremos algún día adecuado para un picnic, puede interesarnos preparar la sorpresa comprando un bañador especial para la ocasión. Sea para hombre o mujer, la idea es que sea lo más erótico posible, y que pueda retirarse fácilmente. Es más, podemos comprar un bañador o bikini extremadamente pequeño, que llevaremos puesto debajo de uno normal y que iremos enseñando eróticamente.
Segundo: elegir el sitio
Siempre es mejor tener pensado un sitio en el que podamos extender la manta tranquilamente. Nos interesa un sitio apartado, para poder hacer algo de exhibicionismo, o al menos enseñar a nuestra pareja nuestras zonas sexuales. También podemos pensar en el topless, lo que nos permite algunas caricias sutiles a los ojos de todo el mundo. O también el uso de paravientos, detrás de los cuales podemos ocultarnos sutilmente.
Tercero: comida erótica
Nada de llevarnos el clásico bocadillo de tortilla! Queremos convertir la jornada en un evento erótico, así que tenemos que hacer uso de todos los trucos gastronómicos que conocemos. Ya hemos comentado en varios posts las posibilidades de la comida: nata montada con fresas, melocotón en almíbar, fruta, etc. Los jugos de la fruta recorriendo el cuello de tu pareja son estupendos para lamerlos suavemente…
Mientras comemos podemos aprovechar para enseñar algo de carne a nuestra pareja, intentando que sólo lo vea él/ella. Si estamos apartados será más fácil y podremos incluso llegar a las caricias sexuales.
Cuarto: dónde acabar
Si estamos en un lugar muy apartado y nos excita el exhibicionismo podremos incluso llegar al sexo oral o la penetración y terminar la relación en medio del monte, bajo el sol. Una alternativa es recoger y llevar el deseo sexual al coche, y allí volver a nuestra época de jóvenes excitados y pasionales. Otra posibilidad es mantener la tensión sexual hasta llegar a casa y allí darle rienda suelta. Así que aquí tenéis varias opciones, para elegir la que más os convenga.
En resúmen, con un poco de buen tiempo y picardía podemos disfrutar de una erótica actividad al aire libre, que combina muchas de las ideas que hemos ido comentando. Prepárate para darle una sorpresa increíble a tu pareja!
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