Recetas – peluquería púbica

Bueno, he decidido llamar «recetas» a aquellos posts que proponen una idea concreta para luchar contra la rutina sexual, como opuesto a las «ideas», que son más generales. El objetivo final es que un lector pueda leer una receta y aplicarla ese mismo día o ese mismo momento, mientras que las ideas requieren que piense cómo aplicarla. Evidentemente se solaparán ideas y recetas muy a menudo.

Así que la receta de hoy es la peluquería púbica (traducción libre de pubic hairdressing): consiste en cortarse o afeitarse de una forma peculiar el vello púbico para generar algo diferente en nuestras relaciones sexuales y así acabar con la rutina. Por supuesto que también hay quien lo hace por razones higiénicas, pero ahí no voy a entrar.

Admito que lo veo más destinado a las mujeres, que tienen una mayor tradición tanto con el pelo de la cabeza como con el púbico. Para muestra, el paseo de playboy desde el vello abundante a la línea casi inexistente:

Pero también puede ser aplicado a los hombres. La gran ventaja, para ambos sexos, es que nadie que no queramos nos va a ver el vello púbico, así que podemos hacer lo que queramos.

Así que ahí va la receta:

Lo primero: elegir estilo

Sin que tu pareja se entere, elige un nuevo «corte de pelo». Sobre todo, algo rompedor, y si sabes que a tu pareja le excita algo en concreto, pues ya lo tienes. Aquí van algunas ideas:

• Completamente rasurado: un clásico de los últimos años. Muy agradable (desde mi punto de vista) en aquellas mujeres que tienen unos labios vaginales visibles y sonrosados;

• Línea finita vertical / ingles brasileñas, que tapa lo justo y todavía te indica que es una zona sexual. Queda mejor cuanto más denso y oscuro tienes el vello y más blanca la piel;

• En V, como el anterior pero algo más complicado. Varias actrices porno usan este modelo, así que ya sabes lo que implica;
• En triángulo, que tiene que tener los bordes muy bien definidos y recortaditos para diferenciarse de la forma normal del vello;
• Otra opción es colorearse el pelo (no veáis la cantidad de hombres que hay con fetichismo por las rubias completas, o las pelirrojas). Para ello hay productos específicos que se venden en sexshops: http://www.elrincondeeros.es/catalog/coloracion-vello-pubico-glo-glo-p-1100.html . OJO: no va a conseguir que un pelo negro se vuelva rubio, aunque sí al revés;
• Intentar las ideas más atrevidas, aunque esto sólo te lo recomiendo si tienes un vello muy denso y que contraste mucho con tu piel:

Para el hombre es lo mismo, aunque en ciertos casos puede ser difícil saber dónde dejar de afeitar (muslos o perineo peludos). Algo habitual es afeitarse el escroto, a fin de facilitar el sexo oral.

Segundo: ponerse a ello

Puedes depilarte o rasurarte, pero te recomiendo que te tomes tu tiempo y te asegures de que tu pareja no va a venir pronto y tengas que acabar la sorpresa a toda prisa. Son zonas delicadas y no queremos sustos.

Si quieres hacer algo más permanente puedes usar cremas depilatorias o la cera (si no te duele mucho), pero si sólo quieres hacer una prueba o una sorpresa, lo más fácil es afeitarte:

• Usa cuchillas nuevas si es la primera vez
• Si tienes mucho pelo, recórtate el pelo primero con una tijera
• Si no tienes ni idea de por dónde empezar, busca algún video en Google

• Si tienes mucho vello o es muy fuerte, un peine fino te ayudará mucho con tu dibujo
• Si se te encarnan los pelos al salir es que tu vello no es muy fuerte, prueba a hidratarte la zona o darte cremas
• Deja un tiempo después de afeitarte, ya que la piel puede estar irritada

Tercero: la presentación

Está bien tener un buen producto, pero además hay que venderlo bien. No dejes que tu pareja te lo vea sin querer y estropee la sorpresa. Si vais a hacer el amor, tenlo tapado todo lo que puedas y luego enséñaselo de golpe, quizás acercándoselo para el sexo oral. También puede convencerle de que te vaya desnudando y dejar que lo descubra él/ella. El caso es mantener la sorpresa.

Cuarto: su turno

No dejes que todo esto haya sido un hecho puntual. Sugiere a tu pareja que ahora le toca a él/ella, y pasad un buen rato eligiendo el estilo. Es más, puedes ayudarle e intentar algo más complicado ahora que tienes experiencia. Le puedes preparar en la ducha, aplicarle la crema de afeitar poco a poco… ya no habrá tanta sorpresa, pero será una actividad sexual muy divertida.