Ideas – como lo hacíamos antes

En toda relación de pareja se pasan por distintas etapas sexuales, cada una con sus propias costumbres, rutinas y preferencias sexuales. Aquí os proponemos recordar una etapa sexual anterior, y probar a repetir lo que nos volvía locos hace un tiempo. Por un lado recordaremos otros tiempos, y por otro probaremos a ver si las viejas prácticas sexuales que teníamos abandonadas nos vuelven a excitar.

Primero: recordando viejos tiempos

Lo primero que tenemos que hacer es acordarnos del tipo de sexo que teníamos hace unos años. Si lleváis mucho tiempo juntos puede que tengáis varias etapas previas a las que poder hacer referencia: al conoceros, novios formales, iros a vivir juntos, etc.

Cada una de estas etapas o épocas de nuestra vida en pareja tendrá su propia vida sexual, con sus propias características:

• Cada cuánto hacíamos el amor: Las primeras etapas suelen destacar por su enorme vida sexual
• Dónde lo hacíamos: En la época de novios quizás no disponíamos de una vivienda y lo hacíamos en un coche
• Cómo lo hacíamos: Las posturas, la prisa, el nerviosismo, la energía…

• Qué solíamos hacer: Toda época tiene sus rutinas sexuales, como por ejemplo cómo le hacíamos ver a nuestra pareja que nos apetecía, o cuáles eran los pasos más habituales al empezar
• Qué no habíamos descubierto todavía: Cuanto más tiempo llevemos practicando el sexo, habremos descubierto más prácticas sexuales y las habremos ido incorporando a nuestra zona de confianza
• Qué era lo que más nos gustaba a cada uno: También han ido cambiando nuestros gustos, y quizás ahora se nos hace raro lo que nos gustaba hace unos cuantos años

• Cuándo lo hacíamos: Puede que durante una época de novios lo hiciéramos de noche, en el coche, mientras que en una época en la que ya vivimos juntos puede que lo hiciéramos nada más despertarnos
• Los problemas que teníamos: Qué nos dificultaba, como por ejemplo el ponernos el preservativo

Así que nos sentamos con nuestra pareja y nos ponemos a recordar. Si tenemos algún tipo de material de aquella época, aún mejor:

• Libros de sexualidad que tuviéramos
• Películas eróticas que viéramos
• Grabaciones o fotos eróticas de nosotros mismos

Segundo: a repetirlo!

Una vez que tenemos claro cómo era nuestro sexo en aquella época, toca repetirlo. Depende de cómo fuera ese sexo tendremos que hacerlo en unas horas o lugares. Lo mejor es intentar replicar todo lo que podamos de esas costumbres sexuales durante un periodo de tiempo, digamos una semana.

Es más que probable que durante este periodo nos acordemos de otras cosas que nos gustaban o que hacíamos. O puede que nos acordemos de prácticas relacionadas que hacíamos en otra etapa de nuestra vida sexual: «¿Te acuerdas? Luego nos dio por…»

Lo importante en esta etapa es mantener la actitud de diversión y juego, disfrutando con el recuerdo y con la práctica sexual. Si queréis divertiros un poco más podéis vestiros como en aquella época.

Tercero: a reconsiderarlo

Una vez que hayamos estado recordando nuestras prácticas sexuales de otra época es recomendable hablarlo y reconsiderarlas. El objetivo es saber si hay alguna práctica de aquella época que nos gustaría incorporar a nuestra vida sexual actual. Es decir, al recordar lo que hacíamos puede que nos encontremos con alguna práctica que dejamos de emplear pero que ahora nos apetece otra vez.

O incluso puede que se nos ocurra alguna forma de mezclar las prácticas antiguas con las nuevas y disfrutar aún más. Aquí lo importante es la imaginación.

Con esta idea no sólo recordaremos viejos tiempos y todo lo que hemos pasado en pareja, especialmente en el terreno sexual. Y con todo esto no sólo recordaremos nuesta vida sexual, sino que conseguiremos un mayor nivel de intimidad en la relación. A por ello!!