La encuesta de estas últimas semanas preguntaba si teníais claro quién era dominante o sumiso en vuestras relaciones de pareja. Y lo más interesante de los resultados es el escaso número de gente a la que no le gustan estos juegos de dominación!
Una dominatrix es una mujer que se dedica profesionalmente a la dominación sexual: controlan la situación totalmente, y a menudo el contacto sexual con sus clientes es mínimo, hasta el punto de que no hay penetración. Si a tu pareja le va ser dominado/a, ¿por qué no interpretas un papel así?
A mi novio le gustaría que le dominase alguna vez. El problema es que no sé me ocurre que cosas hacerle, siempre pienso en lo mismo: atarle, llamarle perro o algo así, decirle que lama mis pies o mis axilas, he probado el facesiting (no sé si se escribe así) pero mi problema es que cuando me toca me vengó abajo y sólo quiero follarmelo como una loca (con perdón).
No soy capaz de mantener el papel de dominante porque pierdo el hilo y no soy muy creativa. Por favor ayudadme, por una vez quiero que sea él quien grite de placer extremo. Gracias
Cuando la rutina se impone muchas parejas prueban la dominación y el bondage ligeros, para ver si les gusta. Un primer intento son las esposas o atar las muñecas, y si nos gusta podemos pasar a ataduras más complicadas. Vamos a ver cómo atar a vuestra pareja a la cama, especialmente cómo y con qué!
Unos lectores nos han preguntado sobre el concepto de «castigar durante el sexo». Aunque parece algo muy duro, tenemos varios niveles de castigo: desde los juguetones hasta los más serios. Vamos a ver esos niveles y cómo usarlos durante el sexo!
Una postura con mucha dominación: él la agarra de las muñecas y toma impulso con ello. Con esto puede penetrarla con fuerza: sólo tienes que fijarte en cómo le tiemblan a ella las nalgas y los pechos. Puede hacerse con una única muñeca o con las dos.
En esta entrada vamos a comentar un juguete erótico que se suele malentender y por ello echa a mucha gente para atrás: el collar! Un collar en el cuello de tu pareja te aporta una estética, te facilita muchos juegos sexuales, roles de sumisión… ¿Te atreves?
Entre la lista de objetos «normales» que tenemos en casa y que pueden utilizarse como juguetes sexuales vamos a ver todo lo que podemos hacer con la cinta aislante, cinta americana, cinta de embalar o cualquiera de sus variantes. Seguro que tenéis un par de rollos en algún cajón, así que dadles un buen uso!
El gagball es un juguete sexual normalmente asociado al bondage y la dominación: Una bola que se pone en la boca para limitar la comunicación, limitando al individuo a gemidos y convirtiéndolo en un objeto sexual. Su estética es muy poderosa, ya que es claramente visible en la cara de nuestra pareja, todo un símbolo de sumisión. ¿Te apetece?
