Cháchara – el tamaño importa?

Casi me da vergüenza poner como título la consabida pregunta «el tamaño importa?«. Entonces, ¿por qué lo he hecho? Porque el otro día iba escuchando la radio (la SER, creo, a pesar de su editorial), cuando se pusieron a charlar sobre este tema, y la verdad es que me impresionó su ignorancia. Me explico…

Uno de los participantes se puso a comentar cómo se sentía avergonzado en los países árabes, mientras que aquí en España sus 14,5 cm superaban a la media (según él 13,5 cm). Con cierto cachondeo nervioso los otros tertulianos le apoyaron diciendo que se comparase con los asiáticos.

A todo el mundo le gusta hablar del Kamasutra, pero pocos se lo han leído. Los que lo han hecho saben que las posturas sexuales son una pequeña parte del mismo. En cuanto al tamaño deja clarísima una idea: lo que importa es el tamaño relativo entre el pene y la vagina.

Un pene grande en una vagina amplia tendrá dificultades para producir placer, mientras que un pene grande en una vagina pequeña chocará contra su cervix, produciendo desagrado. Mira que sencillo y qué lógico.

Pues con esta idea divide los tamaños de pene y vagina en tres rangos: hombre-liebre, hombre-toro y hombre-caballo, contra mujer-cierva, mujer-yegua y mujer-elefanta. Lo que deduce de la división es que relaciones entre tamaños similares son ideales, mientras que si están muy alejados (mujer-elefanta con hombre-liebre), serán difíciles.

Como solución el mismo Kamasutra propone ciertas posturas para estas situaciones desiguales. Las guías de posturas adecuadas suelen incluir esta información, así que si es tu caso, ya sabes a qué estar atento.

El tamaño suele estar dominado por la longitud, dado que es la medida limitante, por la cervix en la vagina (como ya hemos dicho, llegar a golpearla es desagradable). El diámetro no es limitante dada la capacidad elástica de la vagina (al fin y al cabo por ahí sale una cabeza de un niño). En caso de penes pequeños y vaginas grandes también se ha recomendado la práctica de ejercicios Kegel, para fortalecer los músculos con los que apretar el pene y así sentirlo más. En el caso de sexo anal el diámetro sí puede ser un limitante.

Así que la respuesta a la pregunta es evidente: el tamaño relativo importa. Las mujeres que dicen que no importa es porque sólo se han acostado con hombres de tamaños compatibles con el suyo, y al revés. A ver si dejamos de oir tonterías de estas por los medios de comunicación.

Una explicación al hilo del tema

Muchas mujeres se ríen de la preocupación por los hombres por el tamaño de su pene (como que ellas no se preocupan por la talla del sujetador).

La explicación es sencilla: el tamaño del pene se considera culturalmente como una cualidad comparativa para tener relaciones sexuales. Es decir, si tenemos un pene considerable nuestra confianza en nuestra capacidad de atraer hembras será mayor e iremos a por todas.

El problema es que los seres humanos vamos vestidos, con lo que no podemos comparar nuestra herramienta con la de otros, y así nuestros instintos están bastante preocupados al respecto. Por contra las mujeres tienen algo más fácil comparar sus atributos sexuales, aunque la talla de sujetador suele ser una comidilla habitual…

Y de ahí vienen tantos estudios estadísticos sobre el tamaño del pene, tanto tabú y tanta tontería 🙂