Juguetes
Juguetes – las esposas
Unas simples esposas pueden dar pie a muchos juegos sexuales de dominación, juegos de rol, sexo consentido no consentido…
Unas simples esposas pueden dar pie a muchos juegos sexuales de dominación, juegos de rol, sexo consentido no consentido…
Si tuvieras una perversión, algo que te excitase hasta el punto de perder el control, ¿cuál sería? ¿Y cuál sería la de tu pareja? ¿O cuál te gustaría tener? ¿Serías capaz de interpretarla, como en un juego de rol?
Si tienes el tiempo, hazle la masturbación más lenta que puedas: ponle cómodo/a y vete muy poco a poco, empezando con roces suaves y subiendo poco a poco. ¿Cuánto tiempo le puedes tener excitado/a sin acabar de correrse?
Los baños eróticos en pareja, con espuma corriendo por vuestros cuerpos, son un gran momento íntimo. ¿Hace cuánto que no os dais uno?
El sexo cabeza abajo provoca una sensación distinta con la presión, y es muy fácil de probar al borde de la cama:
El annilingus o lamer el ano es una forma de sensibilizar el ano y aprender a disfrutar de sus sensaciones poco a poco:
La cubana o masturbación con los pechos es una forma de excitarle dándole un estupendo espectáculo. Ponte bien de lubricante!
Hay varios formatos de pinzas para los pezones, sobre todo por el control de presión que se ejerce. Si os gusta el estímulo constante en los pezones, revisad los distintos tipos a ver cuál os encaja más.
El perineo masculino es una de las zonas erógenas más olvidadas. Que no se os olvide probar si le pone o no!