Preguntas – Dominación mujer

A mi novio le gustaría que le dominase alguna vez. El problema es que no sé me ocurre que cosas hacerle, siempre pienso en lo mismo: atarle, llamarle perro o algo así, decirle que lama mis pies o mis axilas, he probado el facesiting (no sé si se escribe así) pero mi problema es que cuando me toca me vengó abajo y sólo quiero follarmelo como una loca (con perdón).

No soy capaz de mantener el papel de dominante porque pierdo el hilo y no soy muy creativa. Por favor ayudadme, por una vez quiero que sea él quien grite de placer extremo. Gracias

Respuesta de Sexo Para Parejas

Bueno, parece que sí sabes qué hacerle: todas esas ideas son buenas! Obviamente no todas a la vez: escoges una de ellas, la pruebas y si os gusta a los dos seguís con ella, llevándola un poco más allá, mientras que si no os gusta se abandona. También puedes considerar el edging y controlar cuándo puede eyacular o no, decirle lo que tiene que hacer paso a paso, obligarle a llevar cierta ropa interior, ordenarle que se masturbe delante tuyo, etc.

Pero está claro que el problema es tuyo: no te metes en el papel. Por un lado podría ser que simplemente no te va el ser dominante. Es decir, que puedes imitarlo pero realmente no te gusta. Si es así se te va a hacer algo más difícil, y vas a tener que considerarlo como algo puntual. Pero lo más probable es que simplemente te esté costando meterte en el papel, porque no estás acostumbrada. Para ello te recomendamos:

• Durante el «juego» considera a tu pareja como tu esclavo sexual: está ahí para servirte
• Dale prioridad a lo que te apetece: Si te apetece follártelo como una loca, lo haces! Pero si crees que te a gustar más si él está atado a la cama, pues aún mejor 😉
• Créate un personaje: Intenta ser «otra» persona que sea más dominante. Puedes darle otro nombre o no, pero sí ayuda el que tenga otra forma de vestir, maquillarse, hablar, etc. Una forma muy sencilla de ayudarte a interpretar a otro personaje es ponerte un antifaz o una máscara, y mirarte en el espejo antes del juego. Tanto tú como tu pareja te veréis de otra forma, y eso te ayudará a ser distinta.