Posturas – masturbación masculina

Ya sea como previo al sexo, como actividad en solitario o como show frente a tu pareja, la masturbación es una actividad habitual en la pareja. Otra cosa es que acabe en eyaculación o que sólo la empleemos para ponernos a tono. Vamos a tratar en este post de técnicas para variar un poco la masturbación masculina, que tiende a volverse un gesto repetitivo y rutinario de arriba-abajo con el puño cerrado. Chicas, atentas que esto va para vosotras!

Lo primero es recordar que la sensibilidad de una zona se pierde cuando el gesto se repite mucho: la piel se «acostumbra» a esa sensación. Por ello en estos casos hay que cambiar de postura, forma de agarre, ritmo, etc. Cualquier variación, cuanto mayor mejor, para que vuelva a sentirse el placer en esa zona.

Segundo, si váis a dedicarle mucho tiempo al pene, usad lubricante. Generosamente, nunca es demasiado.

Por ello os comentamos algunas ideas que hemos encontrado en Mypleasure.com para el caso de la masturbación masculina:

• Usa tu mano «mala»: Si eres diestro la izquierda, o al revés;
• Agarra el pene con ambas manos, una encima de otra, y muévelas arriba y abajo, incluyendo un giro en sentido contrario en cada mano desde las muñecas (como si estuvieses acelerando en una moto);

• El clásico: Haz un anillo con el pulgar y el índice, y haz el anillo más pequeño cuando subas, de forma que al bajar el glande tiene que atravesar un espacio más pequeño;
• Empieza con una mano en un movimiento sólo de bajada, y al llegar abajo (al cuerpo) suelta el pene. En ese momento haz lo mismo con la otra mano, y repite. Consigue un ritmo con una mano tras otra;
• Una variación del punto anterior es cerrar fuerte la mano en un puño y obligar al pene a que entre;

• Pon las palmas paralelas a ambos lados del pene y muévelas alternadamente adelante y atrás (como encendiendo un fuego con un palo). Con cuidado, no hay que pasarse;
• Apoya la palma de la mano en el glande, pon la mano como un cazo y muévela hacia todos los lados, apretándolo. Puedes alargar los dedos y agarrar el tronco;
• Coge el glande con una mano, como si fuese un pomo de puerta, y haz un movimiento de giro (dejando que resbale, claro);
• Con una mano masturbas sólo el tronco del pene arriba y abajo (sin tocar el glande), mientras que con un dedo de la otra acaricias el glande con movimientos circulares. Las zonas más sensibles del glande son la raja, el borde inferior y especialmente el frenillo;

• Y un movimiento del que jamás había oído hablar y que no sé si he entendido bien: coge el pene con las dos manos, como si fuera un clarinete (?). Mueve el pene adelante y atrás agarrando la piel sobrante del tronco (esta voy a tener que probarla y confirmárosla).

En askmen.com tenemos unas cuantas técnicas más elaboradas, pensadas para que el hombre pruebe sobre sí mismo, pero que también puede aplicar la mujer sobre él:

• Coger el pene con la palma apoyada en su parte de abajo (dedos apuntando al perineo) y el pulgar en el vello púbico de su base. Lubricarse la mano y la muñeca, y él tiene que bombear de forma que el glande roce contra la muñeca;

• Agarrar el pene con el pulgar y el índice más cerca del cuerpo (de la base del pene), y de forma que ambos empujen el escroto. Cuando movemos esta mano arriba y abajo buscamos que estos dedos masajeen los testículos. Podemos reforzar el masaje con la otra mano desde abajo;

• Ayuda al perineo: Si no has hecho los ejercicios del pubococcígeo (introducción, 1, 2 y 3) con esta postura se te facilita sentirlo. Él se pone de rodillas y se sienta sobre sus pies, y mueve sus piernas de forma que abre sus nalgas (no demasiado). Al ir a eyacular puede intentarlo un poco más, de forma que siente el perineo y su orgasmo se multiplica;
• Coger con una mano el pene por la base y «ordeñarlo» hacia arriba. Al acabar hacer lo mismo con la otra mano y repetir, buscando un ritmo. Esta técnica es la opuesta de una que hemos comentado arriba, y pueden alternarse para un gran efecto doble.

Queremos añadir una técnica más: la de la imagen que abre este post. Colocar el pene entre el índice y el anular, ambos doblados y apuntando hacia abajo, y moverlos arriba y abajo. Excelente…

Hay muchas otras técnicas, y pueden incorporarse juguetes, como por ejemplo los masturbadores. Pero con esto tenemos para hacer unos cuantos experimentos, a hacer los deberes todos!

En Tumblr he encontrado un vídeo en el que se ven algunas técnicas muy bien, y sus increíbles efectos sobre la eyaculación del hombre, que se prolonga muchísimo. Algunas de las cosas que hace ella:

• Usar las dos manos, una aguantando y apretando la base mientras la otra mano se centra en el glande;
• Empezar desde abajo y subir hacia arriba con una mano, y al acabar con la otra de la misma forma, enganchando una con otra en un ritmo;
• «Ordeñar» el pene cuando está eyaculando, siempre ayudando a que salga el semen;
• Masajear los testículos;
• Seguir con la masturbación aún cuando él está eyaculando, buscando prolongar el éxtasis. El grado de sensación que puede aguantar cada hombre en este caso puede variar, y puede necesitar de cierto entrenamiento.

Os recomiendo ver el vídeo y sorprenderos con los efectos y los gemidos del hombre. A cualquier mujer le gustaría y excitaría sentir a su pareja así!