Juguetes – el cinturón

Hay muchos objetos que usamos a diario que pueden emplearse como juguetes eróticos o como atrezo para ayudarnos en nuestra estética erótica. En esta ocasión vamos a mirar cómo incorporar a nuestros juegos sexuales un simple cinturón, y veremos que nos puede dar mucho placer. A por ello!

El cinturón es un objeto que todos tenemos en nuestra casa, con distintas variantes: más anchos o más estrechos, de cuero, tela o plástico, con diversos cierres y hebillas… Pero tenemos que verlos con nuevos ojos y descubrir que pueden usarse como juguetes sexuales, como por ejemplo:

• Azotes: Un clásico asociado a los castigos infantiles, en los que golpeamos el trasero de nuestra pareja con la correa del cinturón doblada. Como ya comentamos los azotes buscan más el sonido y la impresión que otra cosa, evitando el dolor real;

• Como un elemento de dominación: Como la fusta el cinturón puede ser un símbolo de poder. Un cinturón de cuero negro ancho en la mano aporta una estética de fuerza y dominación, que puede ser empleada en los juegos sexuales sin necesidad de llegar a azotar con él. Podemos reforzar esa estética haciéndolo restallar, golpeando la almohada o colchón… Así el cinturón se usa sólo para comunicar una posición de dominación, un juego;
• Una versión más fuerte de la dominación es emplear el cinturón como correa o collar de dominación. En este caso podemos pasar el cinturón por la hebilla sin cerrarla, de forma que tenemos una especie de correa que se aprieta cuando tiramos de ella. Si esta lazo de correa lo ponemos en el cuello de nuestra pareja tendremos un elemento de dominación muy físico. Sin embargo hay que tener cuidado con no tirar demasiado: con pequeños gestos y tirones pequeños podemos ejercer la dominación y ordenarle a nuestra pareja lo que queremos que haga;
• Bondage: De la misma forma podemos emplear este lazo hecho con el cinturón para atar a nuestra pareja: atarle las muñecas a la espalda de nuestra pareja, o quizás atarle las muñecas al cabecero de la cama;
• Decoración: Podemos usar el cinturón de muchas formas originales, que nos valgan como un apoyo estético con el que excitar a nuestra pareja. Podemos emplearlos en nuestros striptease, shows, etc, o simplemente para ayudarle durante los juegos previos. El cinturón que cubre los pezones es un claro ejemplo, y cada estilo de cinturón nos puede dar una idea nueva. Una combinación de distintos objetos con la misma estética refuerza su efecto, por lo que podemos usarlo en combinación con antifaces, guantes, etc.

Así que ahora buscad en vuestros armarios esos cinturones olvidados y dadles un nuevo uso sexual. Ya veréis cómo se os ocurren multitud de ideas divertidas!