Una de las partes más excitantes del sexo es dejarnos llevar, perder el control y que nuestra parte animal nos domine. El sexo se vuelve más primitivo, más duro. Y una de las formas más habituales de expresión de esa animalidad es agarrar a nuestra pareja por el pelo, ya sea para mantenerla quieta o para dirigirla como nos apetezca. ¿Te apetece probarlo?
Agarrar y tirar del pelo de tu pareja puede parecer algo violento, una forma de desprecio y posesión. Pero sólo hay que probarlo para darse cuenta de que es algo muy íntimo y sensual. Te puede gustar más o menos, puedes disfrutarlo muchísimo o no aguantarlo, pero lo que queda muy claro al probarlo es que no tiene ningún tipo de violencia asociada.
Para qué
El agarrar del pelo suele usarse con dos objetivos. Lo más habitual es tirar del pelo como símbolo de dominación: eres mío/a! Como comentamos antes, es una expresión primitiva del deseo, que percibimos como una enorme excitación. De esta forma tanto el que agarra del pelo como el «agarrado» se excitan aún más y disfrutan más.
En este sentido suele ser el varón el que le agarra del pelo a ella, ya que es más normal que tome posiciones dominantes, pero también pasa al revés: la mujer toma el control del sexo y se hace lo que ella diga. Como siempre os recomendamos ir variando el papel de dominante/dominado, a menos que tengamos muy claro cuál es el papel de cada uno.
Cuando se agarra del pelo para expresar dominación hay que hacerlo con firmeza: coger el pelo y mantener una posición. No se trata de pegar un tirón y soltar, porque así lo único que conseguimos es causar dolor. Así que agarrar y mantener.
El otro uso más habitual es como forma de comunicación: expresar qué te apetece o dónde te apetece algo, pero de una manera que no acepta una negativa. Al agarrar del pelo a tu pareja y dirigirla hacia tus genitales le estás indicando sin lugar a dudas que te apetece sexo oral. No es que tu pareja no quiera hacerlo, sino que se lo estás pidiendo y comunicando de una forma erótica y sensual. O si ya está practicándote sexo oral y te apetece más profundo: le coges del pelo y tiras hacia ti.
Hablarlo y probar poco a poco
Vamos a ser sinceros: si no sabes si a tu pareja le gusta esto y decides probarlo sin avisarle, te estás arriesgando a un buen problema. Una buena pista de que a tu pareja le gusta que le agarren del pelo es que te lo haya hecho a ti alguna vez. Lo mejor es ir poco a poco e ir hablándolo:
- En un momento de pasión cogemos a nuestra pareja por el pelo, pero sin tirar (ver la versión romántica más abajo)
- Una vez hayamos acabado le preguntamos si le ha gustado
- Si dice que sí la siguiente vez empezamos a apretar los dedos, de forma que tiramos algo del pelo
- Volvemos a preguntar si le ha gustado
- Si dice que sí empezamos a tirar
Así que hablarlo, probar y sincerarse. Si nos gusta ser poseídos y que nos tiren del pelo hay que asumirlo y disfrutarlo, sin caer en estereotipos. Y si no nos gusta se deja y a otra cosa.
Cómo hacerlo
Lo malo que tiene el agarrar del pelo es que es muy fácil hacer un gesto equivocado y hacer daño. Y aunque hay gente más y menos sensible, el dolor del cuero cabelludo es bastante molesto, y puede ser muy anti-erótico. Así que hay que tener cuidado con lo siguiente:
- Coger una buena cantidad de pelo, nada de coger poco pelo. Cuanto más pelos cojamos más se reparte la tensión en el cuero cabelludo, y menos daño hará. En cambio si cogemos pocos pelos podemos arrancarlos fácilmente;
- En caso de pelo largo coge sólo pelo de la parte trasera, del cogote: Si tu pareja tiene el pelo largo y cogemos a la vez pelos del flequillo o los laterales y de la parte trasera, tiraremos mucho más de los primeros, con lo que dolerá. Así que para un clásico agarre del pelo dominante es mejor asegurarse de que tiramos de la parte trasera. Obviamente este punto no tiene sentido en pelos cortos, donde cogeremos de donde podamos;
- No cogerlo ni en las puntas ni justo en la base: Dolerá más cuanto más lejos lo cojamos, porque tiramos más de unos pelos de otros. Ojo, tampoco justo al lado de la piel, porque se hace mucho tiro hacia el puño. Así que un punto medio es ideal;
- Cuidado al apretar los dedos: Al tirar del pelo apretamos también el puño, y los pelos se pueden enredar entre los dedos, con lo que en realidad estamos tirando mucho más fuerte de lo que creemos. Así que cuidado con dejarnos llevar y cerrar el puño fuertemente;
- Cuidado con los pelos que se enganchan: Si tu pareja tiene el pelo largo es fácil que se te enganche algún pelo en una uña y cuando lo soltemos acabemos tirando de un único pelo. Vamos, que le sueltas el pelo y llevas rápidamente esa mano a algún sitio donde la necesitas más 😉 y al hacerlo te llevas un pelo sin querer. No ha sido a propósito, pero puede bajar la excitación fácilmente;
- Nada de movimientos bruscos: Por todo lo dicho antes es mejor evitar moverse rápidamente, porque para cuando nuestra pareja se queje ya será tarde. Palabras clave a memorizar: firme y tranquilo;
- No hacerlo durante mucho tiempo o muchas veces seguidas: Aunque lo hagamos bien estaremos tensionando el cuero cabelludo, con lo que si lo repetimos al de un rato puede ser excesivo y empezar a doler. Así que a menos que te lo pida tu pareja, limítalo a unos pocos minutos cada vez;
- Subir la intensidad, pero sin tirones Al principio podemos hacerlo suavemente, y conforme estemos más excitados podemos ir subiendo la tensión. Y podemos ir variando la tensión, pero siempre evitando los tirones bruscos!
- Cuidado con el cuello: Si nuestra pareja tiene el cuello mal andaremos con ojo, y siempre es interesante evitar tirar más de un lado que de otro. Un agarre centrado, que hace levantar la cabeza, es ideal;
- También durante los previos: No sólo se trata de dejarse llevar cuando estamos a punto de acabar, sino que es mucho más excitante si lo hacemos durante los previos. Así nuestra pareja verá lo excitados que estamos !
- Aparenta todo lo que puedas: Si lo que le excita a tu pareja es ser dominado/a tienes que actuar como alguien dominante. Si no lo eres interpreta al personaje, y si te cuesta ponte un antifaz. Nada de preguntar, pedir o dudar. Y si necesitas ayuda para ello tienes muchas opciones de apoyo: la ropa, unos guantes, algún juguete «duro»… Es más psicológico que otra cosa: el sexo duro tiene que parecer duro!
- No lo conviertas en rutina: El agarrar del pelo debe ser una expresión de un deseo especialmente fuerte, que nos domina. Si lo hacemos en cada encuentro sexual perderá su significado y su gracia;
- Sorprende a tu pareja: Se deduce de lo anterior, de repente un día te sientes con ganas de esto y no preguntas nada: pillas por sorpresa a tu pareja, a ser posible en un sitio en el que no se lo pueda esperar nunca!
- Combínalo: Suele relacionarse con el sexo duro, así que prueba a amplificar su efecto con otros elementos parecidos: posturas dominantes (el clásico perrito), agarrarle del cuello, algo de lenguaje obsceno al oído, apretarla contra la pared… Imaginación al poder!
Y también hay que tener en cuenta que un pelo bien cuidado, suelto y sin grasa o caspa, es mucho más agradable para estos juegos. Así que si te gusta que te agarren del pelo preocúpate por tenerlo bien a punto y convertirlo en una experiencia placentera para ambos!
Por supuesto puede darse el caso de que a nuestra pareja le guste que le duela, aunque ahí ya estamos entrando en el terreno del masoquismo, aunque a nivel ligero. Aunque hay quien considera que el tirar del pelo es una práctica iniciática de S&M, en realidad tiene dos niveles bien diferenciados: dominación (sin dolor) y masoquismo (con dolor).
Versiones suaves
Si lo del sexo duro no es lo nuestro pero nos atrae el tema del pelo tenemos unas versiones suaves y románticas:
- Pasar los dedos por el pelo, acariciando el cuero cabelludo: Una caricia íntima en una zona que no está acostumbrada, te encantará!
- Agarrar la cabeza firmemente: La mano abierta agarrando la cabeza nos hará el mismo efecto de dominación y dirección que el pelo con más suavidad;
- Meter los dedos entre el pelo y sacarlo suavemente: Serán pequeños tirones que no dolerán (a menos que seamos de pelo rizado o lo tengamos muy enredado), muy relajante;
- El masaje craneal: Aplica las yemas de los dedos en el cuero cabelludo de tu pareja y cierra y abre las manos. El masaje craneal es muy relajante e íntimo, ideal para momentos románticos con poca luz
Si no nos dejamos llevar en exceso y evitamos el pasarnos de fuerza será algo muyyyy excitante! Si queréis más ideas tenéis un tumblr dedicado en exclusiva a esta idea: http://hairpullingsex.tumblr.com/
3 comentarios
Josep Pagès Canaleta ( CARDEDEU ) · 05/06/2014 a las 9:28 pm
Me gusta follar mujeres cojiendolas del pelo y insultarlas despresiarlas me excita mucho , pegarles fuertes cachetes en su trasero
maese · 23/05/2017 a las 6:32 pm
..
Ideas – romperle la ropa! | Sexo para parejas · 23/05/2015 a las 10:07 pm
[…] sexo duro tiene muchas variantes: agarrar del pelo, golpes en varias partes del cuerpo, lenguaje obsceno, etc. Pero hay una forma muy fácil de darle […]